viernes, 2 de abril de 2021

DICHOSOS LOS QUE SE REFUGIAN EN EL CRUCIFICADO

 Bendito aquel que, para que yo pueda anidar en los huecos de la peña, se ha dejado perforar las manos y el costado. Benito aquel que se ha abierto todo entero a mí para que yo pueda penetrar en el santuario admirable y me esconda en lo escondido de su morada. Esta peña es un refugio, dulce lugar donde anidan las palomas, porque los huecos de estas llagas sobre todo el cuerpo ofrecen el perdón a los pecadores y conceden la gracia a los justos. Es una estancia segura hermanos, una roca inaccesible y mi bastión contra el enemigo, 

el habitar, por una meditación constante y amorosa, en las llagas de Cristo nuestro Señor, el buscar en la fe y el amor hacia el Crucificado un refugio seguro para  nuestra alma, un refugio contra la vehemencia de la carne, las tempestades de este mundo, los asaltos
del demonio.


Entra, pues en esta peña, escóndete, refugiate en el Crucificado. ¿Qué es la llaga del costado de Cristo sino la puerta del arca abierta para los que serán preservados del diluvio? pero el arca de Noé era solamente un símbolo, aquí no se trata  de salvar la vida mortal, sino de recibir la inmortalidad. Es, pues, justo que la paloma de Cristo cante hoy con gozo su alabanzas. Del recuerdo o de la imitación de la pasión  de la meditación de sus llagas, como de los escondrijos de la peña, resuena su dulce voz a los oídos del Esposo.


                                                                                             Beato Guerrico de Igny

                                                                                             Abad cisterciense 

martes, 9 de febrero de 2021

ORACION A SAN JOSE

Oración a San José del Papa Francisco
Salve, custodio del Redentor

y esposo de la Virgen María.

A ti Dios confió a su Hijo,

en ti María depositó su confianza,

contigo Cristo se forjó como hombre.

 

Oh, bienaventurado José,

muéstrate padre también a nosotros

y guíanos en el camino de la vida.

Concédenos gracia, misericordia y valentía,

y defiéndenos de todo mal. Amén.