Ayer, viernes 13 de abril, tuvimos la alegría de compartir la eucaristía con las vísperas integradas con el rector del seminario don Aurelio Macias, y un grupo de seminaristas residentes en Valladolid, en total siete.
Consideramos una bendición este hecho que servira para conocernos mejor y para estar más unidos en la oración.
Don Aurelio en la celebración de la misa nos agradeció nuestra fidelidad a la oración, pues estando en el coro, lo veía como el lugar de reunión para la oración en común o silenciosa, dia tras dia, año tras año, así de continuo en fidelidad, siempre hasta toda una vida entera alabando a Dios.
Un seminarista comentó que si se supiera lo alegre que es el monasterio y la luminosidad de la que goza, más gente estaría dentro.
Que el Señor siga llamando y las jóvenes escuchen su voz, para mentener viva la llama de su amor, la belleza de una vida entregada a los demás.
Rogamos por todos ellos para que reciban la bendición de Dios, llena de dones para su vida espiritual.
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